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jueves, 29 de agosto de 2013

TALLER MECÁNICO.

CENTROS DE TRABAJO EN LUZ y FUERZA. ORÍGENES y DESARROLLO.

POR: JOSÉ FRANCISCO COELLO UGALDE.
  
   En esta ocasión, se recuerda al “Taller Mecánico” que, para finales de los años 50 del siglo pasado, estuvo bajo la responsabilidad del Ing. Francisco Peláez F., Superintendente General de Talleres y Mantenimiento. El taller fue establecido en el salón de calderas de la vieja Planta de Vapor de Verónica. Al principio, el salón fue aprovechado para la reparación del equipo del Depto. Civil bajo la supervisión del Sobrestante, Sr. Guardia, que pertenecía a ese Departamento. Se inició con equipo y maquinaria muy sencilla, uno o dos bancos usados, un torno y un talado tomados de la construcción de la Planta de Tepuxtepec.


   Poco a poco, la utilidad del pequeño taller fue mayor y posteriormente pasó al cuidado del Depto. Mecánico y, en 1935 fue puesto bajo las órdenes del Ing. Bohëme (ya fallecido) al cual muchos empleados de la Compañía recordaban con respeto y cariño. Este lugar se conocía hace poco más de 50 años como los Talleres Mecánico y Eléctrico de la Compañía.
   Desde este modesto principio, en que se comenzó con media docena de trabajadores, para la época que se recuerda, luego los talleres de Verónica ya alcanzaban con 223 trabajadores en las Secciones de Mecánica, Electricidad, Mantenimiento y Oficinas.
   El Taller Mecánico se encarga de ejecutar todas las reparaciones del equipo mecánico de las Plantas Generadoras y Subestaciones de la Compañía. En estas reparaciones cabe mencionar la gran variedad de trabajos especializados que se efectúan, tales como: aplicación de soldadura en aleaciones, recubrimiento de metales usando el proceso de metalización, herrería, torneado y maquinado de precisión, soldadura en caliente por inducción magnética; balance dinámico de rotores, etc., etc., y fabrica además una diversidad de piezas como anillos para pistón, contactos para switches, herrajes para líneas aéreas, ejes para bombas, engranes y todas aquellas necesarias en la reparación de compresoras, motores, bombas, revolvedoras y equipo mecánico de cualquier índole.



   El taller está equipado de un conjunto de máquinas-herramienta muy versátil, que incluye 9 tornos en los cuales se pueden maquinar piezas desde 6 hasta 52” de diámetro, fresadoras, rectificadoras, cabezas automáticas para soldar, taller de herrería y metalización, así como unidades especiales para calentamiento de metales por inducción, en las cuales se controla la temperatura y composición molecular de los mismos. El equipo tiene un valor estimativo de 7,000,000 de pesos. La labor de los Talleres resalta con estas cifras: el 80% de las piezas que se instalan en toda la maquinaria que forma el sistema de la Compañía son reparadas, mientras que sólo el 20% está constituido por nuevas.



   El Taller de Reparaciones Eléctricas se concretaba sólo a revisar los transformadores de distribución; por aquel entonces se encargaba de reparar desde un motor pequeño hasta el generador o transformador más grande que exista en la Compañía.
   La Sección de Mantenimiento es de vital importancia para la conservación de las instalaciones del sistema, ya que es la encargada de mantener en operación continua todo el equipo, aún más, el cuidadoso registro que se lleva de cada máquina y de sus refacciones les permite substituirlas con toda oportunidad para prevenir con anticipación probables interrupciones en el servicio que rinden.



   Para los trabajos de mantenimiento pesado y no rutinario en las Plantas, se cuenta en los Talleres con una Cuadrilla Central de Mantenimiento Pesado la que se traslada para efectuar las reparaciones en el sitio donde están instaladas las máquinas; tan importante es esta función que absorbe el 50% del personal del Taller.
   El personal de mantenimiento desarma el equipo dañado, lo repara y lo prueba. Para estos fines se emplean cuatro unidades de transporte, de los cuales, dos, están destinados al envío de herramienta y materiales y los otros para el personal.
   Otra función importante de mantenimiento es la de colaborar estrechamente con la Sección de Seguridad e Higiene del Depto. de Trabajo en todo lo que se refiere a medidas de prevención de accidentes e incendio.
   Los talleres estaban ubicados en la primera manzana de Verónica, ocupando un área cubierta de 2,340 m2.
   Uno de los proyectos de la Compañía es el de cambiar los Talleres a un local especial que fue construido en la zona de Tacuba y reunió desde el principio de su creación todas las necesidades y comodidades para el personal que allí comenzó a laborar. En el nuevo local se concentraron originalmente las Secciones de Talleres Mecánico y Eléctrico, Carpintería, Taller de Reparación de Automóviles y Cuadrillas Centrales de Mantenimiento. En ese mismo predio también se encontraban la S.E. Tacuba, el Garage, la Sección Norte del Departamento de Líneas Aéreas y el Almacén General, a través de una unidad formada por varios edificios que ocupaban una superficie de 60,000 m2.
   “Tengo la satisfacción de que en los Talleres, manifiesta el Ing. Peláez, prevalece un ambiente de cordialidad y buen entendimiento. Periódicamente celebramos juntas de Mesa Redonda con los Jefes de Sección y Sobrestantes en un espíritu de cooperación con objeto de mejorar la producción de los talleres y obtener en esta forma un servicio eficiente en todos los trabajos que nos son enviados por los diferentes Departamentos de la Compañía”.



Todos los datos e imágenes provienen de la Revista LyF, Año II, N° 18, Febrero 1° de 1956, p. 3 a 6.

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